#Barranquilla2018 Los tenis

Cuando llega ese momento de reorganización en nuestros hogares, siempre nos tropezamos con artículos que nos zambullen a los recuerdos. Existen de todos. Un viaje en el tiempo que se rememora con una mega sonrisa, una punzada en el pecho, una lágrima o nace un sentimiento de desprendimiento para ir a lo próximo. Es un proceso de apego y desapego.

A mi me pasó este fin de semana dentro del closet, donde sobran los tenis y faltan los zapatos de vestir. Me río mucho, porque cada vez que tengo una actividad formal el dilema de cuál zapato me pongo me vuelve loca.

Lógico, ¿verdad? Soy amante de los tenis. Amo los tenis. Me fascinan los tenis. Es pisar en el cielo. Creo que eso es lo que provoca que les confiese desde La Estocada lo que me provocó un reencuentro con unos tenis especiales. Los tenis de la última delegación de Puerto Rico a la que pertenecí como esgrimista en unos Juegos Centroamericanos y del Caribe, Cartagena 2006.

Los tenis. (Zacha Acosta) (1)

Están llenos de mucho polvo dentro de su caja, pero eso no le quita brillo a las franjas de colores que representan nuestra bandera. Estaban al final del closet. Los pude ver gracias a la escalerita que tengo para subir al inventario de cajas.

No se crean que mi closet es como el de Carrie en Sex and the City o Anastasia Steele en Fifty Shapes Darknes y Fifty Shapes Darknes Freed. Es reducido y cómodo.

La cuestión es que los tenis pararon la conversación que tenía sobre “que zapatos combinan con esto o aquello”. Me obligaron a sentarme en la escalera y darle para atrás a la película de la vida.

Acaricie sus costuras. Observé sus detalles. Me fijé en sus suelas. Cada mirada me llevaba a repensar en todas las vivencias esgrimísticas con la delegación en ese año y en las decisiones tomadas que me han encaminado a mi presente.

También aparecieron protagonistas importantes en las historias. Amigos y amigas que de ahí pasaron a ser incondicionales. Esos compañeros (as) que siguen brillando en su deporte y ahora, en Barranquilla 2018, posiblemente harán su despedida.

Uff! La transformación de líderes de esa delegación, que ahora tienen la responsabilidad absoluta de un país, de 356 atletas y los ojos del mundo, porque son la mente maestra desde el trono olímpico. Un orgullo ver su transformación.

Una carcajada se me salió. No lo pude evitar. Para los que se creen que los uniformes de las delegaciones siempre fueron tan espectaculares como los del ciclo pasado (2014-2016) y los que se van a ver desde 2018 hasta 2020, les digo que NOOOOOOOOOO. En estos tiempos modernos hasta los uniformes han sido confeccionado respetando la equidad de género. Se buscan los modelos para damas y para caballeros. Es muy poco lo que existe de esos pantalones unisex o esos tiros de pantalones que molestaban tanto, que raspaban las entrepiernas. Y… están a la venta al público.

Estos tenis me trajeron a la realidad. Este presente que me lleva a imaginarme las conversaciones del 63% de la delegación que se estrenará en Barranquilla 2018.

Yo solo deseo que cada uno de los que tienen la oportunidad de ir a sus primeros Juegos, sean Centroamericanos y del Caribe, Panamericanos u Olímpicos puedan guardar su artículo deportivo favorito y se tropiecen con él luego de un tiempo, para llevarlos a ese recuerdo tan maravilloso que deja el competir por Puerto Rico.

¡Guarda tus tenis!

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