Encontrarse con potenciales heroínas deportivas en el presente es un privilegio. Mucho leemos de nuestras ancestras como la polifacética Rebekah Colberg, la esgrimista Gloria Colón, la voleibolista Carmen Rosa Sabater, la softbolista Ivelisse Echevarría, la taekwondoista Ineabelle Díaz, la arquera Gloria Rosa, etcétera.
¡Son mujeres extraordinarias! Cada una y todas las demás que me faltan por mencionar han trabajado en ese camino que seguimos abriendo paso en el deporte: la equidad de género y el respeto por la dignidad femenina.
Shirley Ferrer a su corta edad y con una magistral representación con la Selección Nacional también lo ha demostrado, teniendo todavía compromisos como jugadora profesional en el deporte de la malla alta.
Su retiro del #EquipoPUR deja un legado para las atletas y los atletas que tienen la valentía de levantar su voz con una opinión acertada y respetuosa.
La Estocada
Desde que observé a Shirley en sus años universitarios con las pasadas Cocodrilas de la Universidad Metropolitana en la Liga Atlética Interuniversitaria, me inspiré. ¡Sí, me inspiré! Yo siempre busco inspirarme en alguien para seguir aprendiendo o desaprender y volver a aprender.
Más que su juego, daba cátedra de respeto, liderazgo y lucha en y fuera de la cancha.
La Estocada
Primero, que su raza es negra. En estos tiempos trumpnianos no ha sido fácil. Se ha disparado el racismo y a su vez un levante en la lucha de los derechos civiles, no solo por los negros, sino por latinos y emigrantes. Shirley ha sido vocal en la defensa de los derechos humanos.
En el deporte, se expresa por mejores oportunidades para las féminas y para todos. ¿Por qué separo a las féminas? Ya vemos que todavía nos falta camino para lograr la equidad deseada. Las gotas de sudor no acabarán, seguirán saliendo por el esfuerzo que se debe hacer para lograr el balance.
La sociedad ha sido algo que ella ha tomado en consideración. Dar lo mejor de sí para los ojos jóvenes, de niños y de niñas y para los del núcleo familiar. ¡No es para menos! Se ha destacado por sembrar en cada puertorriqueño y puertorriqueña, y en cada espacio internacional que la adopta para laborar con balón en mano, valores con el propósito de crear una mejor civilización.
Shirley podrás darle un descanso a la franela que tanto nos inspira con solo diez letras, P U E R T O R I C O, bañada de rojo, azul y blanca. Sin embargo, sé que no estará en descanso tu habilidad de fomentar un mundo lleno de igualdad, respeto, amor y de abundancia.
La Estocada
¡Gracias por dejarte ver como lo que eres ante mis ojos, una Olímpica de corazón!